Después de una colosal batalla, el futuro de los Siete Reinos pende de un hilo, acuciado por nuevas amenazas que emergen de todos los rincones y en todas direcciones. En el este, Daenerys Targaryen, el último eslabón de la Casa Targaryen, gobierna con sus tres dragones como la reina de una ciudad construida sobre polvo y muerte. Pero Daenerys tiene miles de enemigos, y muchos se han propuesto dar con ella. A medida que ellos la buscan, un joven emprende su propio camino hacia la reina, con un objetivo diametralmente distinto...
Tyrion Lannister también se dirige hacia Daenerys mientras escapa de Poniente, donde le han puesto precio a su cabeza.
Sus nuevos aliados en esta huida, no obstante, no son los malhechores que aparentan ser, y entre ellos se encuentra aquel que podría impedir que Daenerys tome el control de Poniente para siempre.
Mientras tanto, al norte se halla el colosal Muro de Hielo.
Allí, Jon Nieve enfrentará el más grande de los retos: sus más acérrimos enemigos no sólo forman parte de la guardia que dirige, sino que se extienden más allá de la tenebrosa tierra de las criaturas de hielo.
De todos los rincones, enconados conflictos cobran nuevos bríos, traiciones íntimas se perpetran y un gran elenco de proscritos y sacerdotes, soldados y criaturas camaleónicas, nobles y esclavos, enfrentarán obstáculos en apariencia insuperables. Algunos fracasarán, otros crecerán en la fuerza de la oscuridad.. Pero en tiempos de agitación tu crescendo, los hilos del destino y la política arrastrarán a los personajes y al lector, inevitablemente, a la más espectacular de las danzas.
Hice trampa, lo admito rotundamente y no pienso ocultarme. Cuando comencé a ver "Game of Thrones" no tenía idea del maravilloso mundo que el genio retorcido de George R. R. Martin había creado; y para colmo los libros ni por casualidad se conseguían, salvo si tenías la fortuna de hallar una versión española, escasa y cara. Así que después de haber quedado con la boca abierta con la primer temporada, llegó la segunda y sin noticias aún de conseguir los libros; y yo retorciéndome un año por saber lo que sucedería con mis personajes favoritos. Así, que cuando finalmente tuve oportunidad de comprarme los libros, hice trampa... en vez de comenzar por el principio como debería me aventé a leer el tercer tomo de la saga de Canción de hielo y fuego: Tormenta de espadas y luego Festín de cuervos. También tengo Juego de tronos pero lo voy leyendo de a poco, y me falta sólo el segundo para culminar la colección.
Devoré el tercer y cuarto libro y cuando el año pasado vi el quinto no pude evitar comprarlo... leerlo fue todo un tema aparte. Danza de dragones nos trae el mundo de GoT luego de que la guerra se disipara un poco, con varios reyes muertos, Daenarys al otro lado del Mar Angosto y Stannis en el Muro; la "paz" del trono del niño rey Tommen parece mantenerse. La acción se relatiliza y da paso a las negociaciones, algunas venganzas y un sin fin de conspiraciones que es de lo que trata el juego de tronos.
En este libro van a dominar las perspectivas de Tyrion, Daenarys, Jon y Hediondo; también vamos a saber que sucede un poco con Bran, Davos, y muy al final tenemos un capítulo único de Jaime y algunos de Cersei. Junto a estos personajes que ya reconocemos también se añaden las de nuevos personajes o tal vez necesarios para contarnos que es lo que está sucediendo al otro lado del mundo. Así, los escenarios que van a predominar van a ser el Norte, con Invernalia y el Muro; y la Bahía de los Esclavos y las Ciudades libres; un mundo de blancoscuros y coloridos infinitos; tenemos austeridad por un lado y un mundo extravagante por otro. No muy diferente a nuestra propia historia y es por eso que amo tanto este tipo de literatura, porque es un reflejo de todo aquel mundo medieval, de las cruzadas y las culturas orientales que pronto iban a eclosionar. En otros aspectos, hay tintes de la antigua cultura greco-latina, con las leyes de hospitalidad -sorry, estudio Letra y no puedo evitar notar algunas cosas, tantas como para preguntar en medio de una consulta de un parcial al respecto, true story!
Debo admitir que este libro me llevo una eternidad terminarlo, me resultó bastante pesado -y no hablo sólo del tamaño del libro- y acabó dejándome más incertidumbres que certezas; y está bueno, pero sufro como loca por no saber qué va a pasar con el destino de estos héroes y antihéroes de Westeros.
Personalmente en este libro disfruté conocer un poco más del amplio entramado del juego de tronos, y me da mucha curiosidad saber cómo harán la adaptación para la serie. Tyrion y Jon fueron dos de mis personajes favoritos; el primero porque sencillamente es un genio y estratega nato; y el segundo, porque tiene muchas agallas -desde el principio-, más de las que Jon Snow de la serie demuestra, aunque en los últimos episodios de la cuarta temporada empezamos a ver a un Lord Snow diferente y eso me gustó. Por otro lado, cuando la historia de Daenarys comenzaba a ponerse más que interesante se fue en picada, una pena. Y el epílogo final con el retorno de un personaje desaparecido por bastante tiempo fue sencillamente genial.
El único capítulo de Jaime me dejó con un nudo en la garganta y es todo lo que puedo decir al respecto sin revelar algo. Sofía me preguntó en una foto que publiqué cuando estaba por empezar este capítulo ¿Cuál Jaime me gustaba más? ¿el de la serie o el libro? Jaime Lannister es un personaje complejo, al principio lo detestaba pero una vez que el velo de arrogancia se fue desvaneciendo a medida que cruzaba los Siete Reinos hasta Desembarco del Rey, sencillamente me enamoré. Y sí, es detestable y no es trigo limpio como diría mi tía; pero es humano y la suma de la experiencia. Hay cosas del carácter del Jaime del libro que no se transmitieron demasiado bien, porque luego de que regresa finalmente él ya no es más el mismo. Deja de verse a sí mismo como una arma y comienza lo que para mí es el camino de la redención; y esto comienza a verse en su actuar y en las decisiones que toma. En libro se más pronto esto, quizás en la serie se distorsionó esto por la tan conflictiva escena de violación -que en el libro no es para nada así- a Cersei. Por otra parte, amo que en la serie hayan excluido en la escena de liberación de Tyrion una confesión que él le hace y hace que el último encuentro con su hermano concluya con discusión; y no con la hermosa escena de amor fraternal. Y la relación entre Tyrion y Jaime es hermosa. Esa es mi respuesta.
De los libros que llevo leído de la saga, este no es mi favorito. Le doy cuatro estrellas. Disfruté mucho más los dos anteriores, será tal vez porque estaba plagado con mis personajes favoritos y muchas más acción. Y lo peor de todo fue que en este tampoco pude dilucidar algunas cuestiones que me dejaron al borde la silla en Festín de Cuervos.
Habrá que esperar hasta el próximo libro, que si entendí mal sale este año. Mientras tanto espero ansiosa la quinta temporada de GoT.